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2000

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Espectáculo de Marcela Aguilar.

 

La danza es el lenguaje de las imágenes en movimiento, y en esencia no implica ningún mensaje conceptual, es abstracción, es síntesis, es la poesía del cuerpo humano en movimiento. Esto es precisamente lo que atrapa la atención del niño, a él no le interesa la literalidad de una historia completa contada con palabras. Su mundo está determinado por la fantasía, la imaginación, los sueños, y es la danza quien puede comunicarse con él a través de las sensaciones que le provoca.

 

El Carnaval de los Animales es un espectáculo para niños de todas las edades, y su objetivo es acercarlos al universo de la danza y, siguiendo las intenciones de Saint-Saëns, al de la música.

 

Con la socorrida metáfora de las fábulas tradicionales, la partitura logra magistralmente su objetivo pedagógico musical, asociando un ritmo a cada animal, pero Saint-Saëns supera este simple ejercicio e imprime a cada una de sus partes un carácter; aprovechándolo, Marcela Aguilar concibe su coreografía exagerando estos caracteres a través de una suerte de humanización de los animales que los hace más identificables para los niños.

La obra se estrenó en la ciudad de México en 1991 por iniciativa de una empresa productora de espectáculos para niños llamada Imaginarium, que encargó al grupo Calydra, dirigido por Marcela Aguilar, una pieza de danza para niñ[AGV1] @s. El grupo Calydra y, en 1994, Marcela Aguilar montó la obra a la Compañía Nacional de Danza de Costa Rica, que la presentó hasta 1998. En 1999 El Curro DT invitamos a Marcela Aguilar para realizar una tercera adaptación. El Carnaval de los Animales, tiene en su haber más de 1.500 representaciones, con lo que se puede estimar que cerca de 200.000 niñ@s lo han visto en las más variadas circunstancias, desde las elegantes butacas del Palacio de Bellas Artes de la ciudad de México, hasta los rotos banquillos de un bar improvisado sobre el barro para la “Feria de las Frutas” del pueblo de Pacayitas, aislado en la zona selvática de Turrialba, Costa Rica. Definitivamente, las satisfacciones que se han obtenido de El Carnaval de los Animales lo revelan como un contundente buen trabajo.

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